Los juegos y apuestas son temas realmente atractivos y divertidos, que seguramente más de uno los habrá probado en alguna oportunidad. Tienen la particularidad de generar adicciones, hasta llegar al punto en el que no se tiene un correcto manejo del tiempo o del presupuesto disponible que se puede apostar. Existen leyes que permiten reforzar medidas de protección ante personas susceptibles a estos casos, en donde se destacan los menores de edad y los ludópatas.
La finalidad de estas leyes de regulación, es eliminar los monopolios injustificados, y el frenesí durante un tiempo determinado. Miembros de Hacienda y modelo económico y entes gubernamentales del país vasco, han observado la necesidad de adaptar nuevas normas y reformas que incluyen los estatutos que se encuentran vigentes desde el año 1988 hasta la actualidad, que han regulado las apuestas y el juego de un modo efectivo.
Una de las principales características que se encuentran dentro de la regulación es llevar el arte del juego como un acto responsable, además de una actividad supervisada que puede defender al usuario ante las ludopatías y los actos descontrolados en estos espacios. Una de las medidas empleadas por estas leyes es brindar coherencia en regulaciones existentes y actualizarlas con exigencias normativa, y otorgar conocimiento en orden sectorial.
El objetivo de esto es brindarle un mejor estado de seguridad jurídica y claridad en cuanto a la interpretación y aplicación de estas leyes de regulación de juego y apuestas en el país vasco, la cual se recoge en la ley 4/1991 modificada en el 2012 para actualizar las normas europeas en prestación de servicios.
La meta final de las leyes de regulación de apuestas en el país vasco, homogeneizan el tratamiento de los sectores de juego, una planificación global de todo el sector y su impacto de la oferta en la población, sin olvidar los juegos en línea de carácter estatal e internacional.
ALGUNAS NORMAS DE LAS LEYES DE REGULACIÓN DE JUEGO Y APUESTAS EN EL PAÍS VASCO
Estas leyes, permiten que los procesos administrativos sean mucho más rápidos, cortos y generalizados, y reconocen empresas de juego, fabricantes y otras áreas de este sector por parte de autoridades autonómicas y estatales, sin necesidad de tener locales físicos con un título adaptado a las normas vascas.
Facilita que las personas adapten las ofertas según la evolución técnica y del mercado. Esto hace que se puedan regular los actuales sistemas de juego físico y los de medios telemáticos , garantizando la integridad y transparencia de las partidas en este nuevo panorama de la era digital.
Para evitar la adicción a las apuestas y al juego como tal, se encuentra una ley de regulación que mitiga los aspectos más adictivos y le otorgue garantías al jugador. Limita los permisos de explotación de máquinas, al igual que los premios y partidas, velocidad de las jugadas las distancias entre uno y otro local, evitando la congestión.
Con todas estas leyes, el arte del juego se hace mucho más seguro y efectivo. Se pueden practicar las apuestas sin ningún problema, ya que las normas se encargan de velar por las instalaciones y sus visitantes.